
Jeremía 7: 1-6 Mejorad vuestros caminos y vuestras obras
(Palabra de Jehová que vino a Jeremías, diciendo: Ponte a la puerta de la casa de Jehová, y proclama allí esta palabra, y di: Oíd palabra de Jehová, todo Judá, los que entráis por estas puertas para adorar a Jehová. Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: Mejorad vuestros caminos y vuestras obras, y os haré morar en este lugar. No fiéis en palabras de mentira, diciendo: Templo de Jehová, templo de Jehová, templo de Jehová es este. Pero si mejorareis cumplidamente vuestros caminos y vuestras obras; si con verdad hiciereis justicia entre el hombre y su prójimo, y no oprimiereis al extranjero, al huérfano y a la viuda, ni en este lugar derramareis la sangre inocente, ni anduviereis en pos de dioses ajenos para mal vuestro)
El Señor manda a Jeremías a que se colocara en la entrada del templo, donde todas las personas debían pasar para entrar en él, y el Señor le dice a Jeremías di: Así dice Jehová de los ejércitos, Dios de Israel ¡Mejorad vuestros caminos! Pero la pregunta es ¿A dónde iban ellos? Iban al templo, iban a la iglesia, pero el Dios que supuestamente ellos iban a adorar, era el Dios que les mandó a decir por medio de Jeremías ¡Mejoren sus caminos! Significando esto, que estar en la iglesia no es suficiente. ¿Será que acaso ellos iban a un bar? ¿A una discoteca? ¿A un prostíbulo? No, ellos iban al templo, a la iglesia, sintiéndose muy seguros, pero a pesar de que la casa era de Jehová, ya Jehová no estaba allí. Dios les dice: Mejorad vuestros caminos y vuestras obras, y os haré morar en este lugar, ¿Qué significaba morar en este lugar? No sólo tendrán que venir e irse, venir e irse, sino que vivirán en este lugar, lo que significa que Dios vendría a habitar con ellos. Pero ellos pensaban que Dios habitaba con ellos. Nuevamente hago énfasis, ¿A dónde iban ellos?
La iglesia no es suficiente, muchos podrán decir yo voy a la iglesia, otros afirmaran ir todos los domingos, podemos estar sentados escuchando el mensaje, podemos estar cantando, sirviendo en la iglesia, pero podemos encontrar a Dios diciéndonos: ¡Mejorad vuestros caminos!
Veamos de nuevo el versículo 4: No fiéis en palabras de mentira, diciendo: Templo de Jehová, templo de Jehová, templo de Jehová es este
“No creas en las palabras de mentiras” habían falsos profetas ya rondando por Judá diciéndole a ellos, “Si estamos en el templo estamos seguros”. Por eso Jeremías le decía a ellos, no creas esa mentira ¡Estamos en la iglesia, estamos en la iglesia! porque la iglesia no te hace santo, estar en la iglesia no nos hace santos. El Señor no viene a buscar todo lo que está en su iglesia, el viene a buscar SU IGLESIA, el no viene por todo lo que esté dentro de su iglesia, el vendrá a buscar SU IGLESIA. No es que el Señor va a pasar y va a salvar una persona recta delante de él, pero como su esposa está a su lado, Él va a decir, también te llevo conmigo ya que estás allí, no importando su condición espiritual. No querido amigo y hermano. Es necesario mejorar nuestros caminos
¿Cuál problema tenía Israel? Ellos estaban yendo a la iglesia, pero su vida no estaba cambiando, su vida no estaba mejorando, nosotros no estamos llamados sólo a alcanzar un nivel específico de santidad, no estamos llamados a hacer algunas actividades en la iglesia, sino que estamos llamados a mejorar en cada una de las facetas espirituales de nuestra vida. Por ejemplo: Si yo recibí a Cristo en mi corazón hace 10 años, y por la fe, por la obra del Espíritu Santo yo fui santificado, después de 10 años en sus caminos, yo debo ser más santo todavía, después de 20 años en sus caminos, debemos ser aún más santos, porque el camino del Señor es un camino para mejorar, es un camino para crecer, no es un camino para estancarse, y mucho menos abandonar o retroceder.
El pueblo de Judá también tenía un problema, ellos estaban confiados en sus grandes templos, ellos confiaban que en ese lugar Dios estaba, pero lamentablemente ellos tenían un grave error para ese momento, veamos Jeremías 3: 6-9
(Me dijo Jehová en días del rey Josías: ¿Has visto lo que ha hecho la rebelde Israel? Ella se va sobre todo monte alto y debajo de todo árbol frondoso, y allí fornica. Y dije: Después de hacer todo esto, se volverá a mí; pero no se volvió, y lo vio su hermana la rebelde Judá. Ella vio que por haber fornicado la rebelde Israel, yo la había despedido y dado carta de repudio; pero no tuvo temor la rebelde Judá su hermana, sino que también fue ella y fornicó. Y sucedió que por juzgar ella cosa liviana su fornicación, la tierra fue contaminada, y adulteró con la piedra y con el leño)
Recordemos que para este tiempo de la historia, el reino está dividido, estaba el pueblo de Israel compuesto por 10 tribus, y Judá el reino del sur, compuesta por Judá y la tribu de Benjamín. Ya el pueblo o la tribu de Israel habían fornicado, pero ¿Qué significa fornicado? Ellos iban al templo pero así como adoraban a Jehová, adoraban a Baal, creían en un montón de cosas, muchos hoy dicen amar a Dios y confían en las vírgenes, creen en cualquier clase de santo, le rinden homenaje, los veneran etc.
Dios hablando a través de Jeremías dijo: Miren lo que hizo la rebelde Judá, a pesar de que vio como le di carta de repudio a su hermana (Israel) de como Dios castigó a Israel, ella no tuvo temor, sino que también fue ella y fornicó. ¿Cuál era el problema que Dios tenía con Judá? El problema que tenía Dios con Judá, era que su adoración, era una adoración sincrética, lo que significa que su adoración estaba mezclada con adoración a otras cosas, no sólo era Jehová, de hecho en la Biblia podemos ver que el problema con el pueblo de Israel no era tanto que ellos no querían adorar a Dios, sino que adoraban a todo lo que ellos consideraban un ser divino, se les había olvidado lo que Dios habló en Deuteronomio 10: 20 ( A Jehová tu Dios temerás, a él solo servirás, a él seguirás, y por su nombre jurarás)
Lamentablemente el concepto de adoración en muchas iglesias se ha resumido en cantar 2 o 3 canciones, y pareciera que es suficiente, estamos contentos y seguros porque cantamos dentro de la iglesia, pero la adoración va mucho más allá que esto, la adoración es obediencia, es santidad, es pureza, es apartarte sólo para Dios, si nosotros no somos capaces de apartarnos sólo para Dios, entonces tenemos una adoración sincrética, una adoración combinada con toda clase de cosas. La adoración no es el resultado de un logro, la adoración es una demanda.
Pero veamos como este pueblo seguía expresando una adoración tan insultante para Dios. Malaquías 1:6 (El hijo honra al padre, y el siervo a su señor. Si, pues, soy yo padre, ¿dónde está mi honra? y si soy señor, ¿dónde está mi temor? dice Jehová de los ejércitos a vosotros, oh sacerdotes, que menospreciáis mi nombre. Y decís: ¿En qué hemos menospreciado tu nombre?)
El Señor toma esta referencia para demostrar como Judá no estaba honrándolo a Él, y lo mismo pasa hoy con muchos cristianos, viven la vida en la semana como si Dios no existiera, adoramos inclusive otras cosas, nos creemos autosuficientes y que no necesitamos a Dios, pero luego llegamos el domingo a la iglesia, levantamos las manos y cantamos como si nada pasara.
El pueblo debía ofrecer en sacrificio corderos sanos, limpios, sin defectos, pero los sacerdotes ofrecían cualquier cosa, corderos cojos, ciegos, sucios, con defectos y tuvieron el descaro de preguntarle a Dios, ¿En qué hemos menospreciado tu nombre? Pero Jehová les responde: Malaquías 1:8 (Y cuando ofrecéis el animal ciego para el sacrificio, ¿no es malo? Asimismo cuando ofrecéis el cojo o el enfermo, ¿no es malo? Preséntalo, pues, a tu príncipe; ¿acaso se agradará de ti, o le serás acepto? dice Jehová de los ejércitos) Adicionalmente el versículo 13 explica que la actitud con la que ellos ofrecían el sacrificio no era correcta. Malaquías 1:13 (Habéis además dicho ¡Oh, qué fastidio es esto! y me despreciáis, dice Jehová de los ejércitos; y trajisteis lo hurtado, o cojo, o enfermo, y presentasteis ofrenda. ¿Aceptaré yo eso de vuestra mano? dice Jehová.
Muchos inclusive en la iglesia de hoy, se expresan de esta manera, ¡Hay que fastidio cantar!, ¡Qué fastidio levantar las manos!, ¡Qué fastidio tener que ir a la iglesia! Porque no hemos entendido el concepto de adoración, no hemos aprendido que a Dios se le tiene que tener temor y reverencia.
Éxodo 20:1-3 (Y habló Dios todas estas palabras, diciendo: Yo soy Jehová tu Dios, que te saqué de la tierra de Egipto, de casa de servidumbre. No tendrás dioses ajenos delante de mí.)
Empezando por aquí, Dios dice: “No tendrás dioses ajenos delante de mí”, es decir debemos apartar todo, la adoración comienza con un corazón absoluto para adorarle a Él, si adoramos a Dios pero también a madre, padre, hijo etc. Estamos haciendo mal las cosas.
En el hombre siempre habrá un corazón propenso a idolatrar cualquier cosa, no sólo idolatría es venerar una imagen, tenerla como una especie de amuleto o rezarle, si nosotros ponemos un nombre por encima de Jesucristo, ya estamos idolatrando. Daniel en babilonia, pudo ser uno de los hombres más idólatras que pudiese existir, primero a él se lo llevan como esclavo a Babilonia, cuando pudieron haberlo matado, pero el Rey Nabucodonosor le perdonó la vida, lo puso a vivir en el palacio y adicionalmente iba a comer la comida del rey. Seguramente muchos habrán pensado ¡Wow Daniel debía ser agradecido con Nabucodonosor! Pero cuando llegó el plato y Daniel ve la comida, el dijo: ¡Yo no comeré eso! Quizás el que le llevó la comida habrá pensado ¡Que ingrato eres Daniel, luego de lo bueno que ha sido el rey contigo! Pero Daniel propuso en su corazón, no contaminarse con la comida del Rey ¿Cómo hubiésemos reaccionado nosotros el día hoy? Que cuando algo nos sucede, en vez de dar gracias a Dios agradecemos al gobierno, al jefe, al amigo de toda la vida, entre otros y Dios ni siquiera se menciona
La biblia nos muestra que cuando un hombre hace bien a otro hombre allí se manifiesta la obra de Dios, porque el hombre es malo por naturaleza, el único bueno se llama Dios. El joven rico se acercó a Jesús y le dijo: Maestro bueno, pero Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? El único bueno es Dios.
Éxodo 20:4 No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra.
¿Cómo nace la idolatría a la iglesia católica? EL papa León I, en la basílica, el veía a la gente cantando, y pensó que a la gente le falta inspiración, mandó a llamar al pintor Leonardo Da Vinci y le encomendó pintar imágenes, para que la gente al ver las imágenes “Se inspiraran”
Nosotros los cristianos no necesitamos ninguna imagen para inspiración, pues la adoración proviene de la obediencia a Dios, viviendo una vida alejada del pecado, entonces ¿Qué hacemos con amuletos encima? ¿Por qué aún muchos usan una cruz o cualquier otro símbolo como si Dios los cuidara por tener eso puesto? Los cristianos tampoco adoramos a ángeles, ni vírgenes, ni a pastores, ni salmistas, nada, sólo Dios merece adoración, cuidado con las iglesias donde prácticamente se adora a sus líderes, donde muchos piensan que sin ellos la obra de Dios no avanzaría, ¡Cuidado! Esto también es idolatría.
Estudiemos un poco Éxodo 20:
Éxodo 20:4 No te inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen
¿Qué maldad Dios está hablando en este pasaje? La maldad de la adoración incorrecta, corrupta, ilegítima, adorar no es un juego hermano y amigo, no es que vamos a la iglesia porque estamos aburridos, porque el ambiente es chévere o porque no tengo nada que hacer, adorar es la razón por la cual vivimos, vivimos para servirle y glorificarle a Él
Malaquías 1:13 Habéis además dicho ¡Oh, qué fastidio es esto! y me despreciáis, dice Jehová de los ejércitos; y trajisteis lo hurtado, o cojo, o enfermo, y presentasteis ofrenda. ¿Aceptaré yo eso de vuestra mano? dice Jehová.
Este pueblo demostraba una adoración fastidiosa, apática, pareciera como si Dios estuviese rogándoles ¡Adórenme por favor! Tengamos nosotros cuidado de no caer en esto, hoy también hay fatiga al adorar, ¿Y saben porque sucede esto? Porque no hemos conocido quien es Dios, no hemos entendido lo que hizo Dios y a donde nos quiere llevar, se nos olvida que no sólo nos dio la vida, sino que también salvó nuestra alma, necesitamos mejorar nuestros caminos en la adoración y la comunión con Dios.
La adoración en Judá se iba degradando, cada día la adoración era menos, tenía menos intensidad, era menos de corazón, era más mecánica, su adoración era de boca, por eso su corazón iba alejándose y alejándose de Dios. Si no hay adoración de nada sirve todo lo demás, si Dios no está siendo adorado, ya todo es un fracaso.
¿Es bueno estar en la iglesia? Por supuesto que sí, debemos congregarnos, pero no es suficiente, debemos mejorar nuestros caminos, la comunión con Dios, la intimidad con Dios debemos llevarla a nuestros hogares, nuestros trabajos, donde quiera que estemos, no sólo conformarnos cuando estamos entre 4 paredes, el Nuevo testamento anula la adoración en lugares, cuando la mujer Samaritana habló con Jesús, le dijo que sus padres adoraban en ese monte (Sion) y que ellos decían que en Jerusalén es el lugar donde se debe adorar, pero Jesús le responde: Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren (Juan 4:23). Por eso la adoración es espiritual, debe ser en todo lugar.
Malaquías 1:13 resalta ¡Y trajiste de lo hurtado! Increíble, llevaban al templo cosas robadas, era como la adoración al estilo Robin Hood, robar para dar a los pobres, pero a Judá se le olvidó que Dios no justificaba ese pecado, y menos para usarlo en ofrenda a Dios, hoy día no es tan diferente, muchos llamándose cristianos están participando en estafas, trampas, obteniendo un dinero ilegal, y de repente, quieren ofrendar y diezmar para Dios como si con esfuerzo propio alcanzó y obtuvo lo que obtuvo, usted podrá llamarlo astuto, pila, picar adelante, etc. Pecado es pecado, y eso no se puede justificar.
Conclusión: Jeremías predicó más de 40 años, y ninguno le creyó, el mismo Rey lo quería matar, el pueblo le tiraba piedras, predicaba que babilonia los iba a invadir pero todos lo ignoraban, 70 años de esclavitud en Babilonia, 430 años en Egipto, Israel prácticamente vivió más en esclavitud que en libertad y todo por la única razón, no querían cambiar, no querían mejorar sus caminos, los pocos tiempos que tuvieron paz, tranquilidad y protección de Dios era porque el Rey hacía lo recto delante de Dios, puede leer las crónicas de los reyes de Israel y Judá. Cuando Jesucristo vino al mundo, el pueblo aún era esclavo, y no porque Dios quería, todo era el resultado de no atender al llamado de Dios
Si estamos en pecado ni la iglesia o el templo nos va a proteger, debemos vivir una vida alejada del pecado, no permitamos que el sistema corrupto de este mundo y de este país nos lleven a pecar, a mentir, estafar, engañar, robar, etc. Debemos seguir aferrado a Dios para ser verdaderos adoradores, obedientes a su Palabra, en un país tan inmoral, con tanta maldad y corrupción. Dios nos pide a sus hijos mantenernos en santidad, “Mejoren sus caminos, aferrémonos a Dios”, si el mundo no quiere cambiar, ¿Qué haremos los hijos de Dios?
Juan 8:32 “Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres”
Pastor David Durelia